Inmediatamente después de un accidente, tu prioridad debe ser el tratamiento rápido de tus lesiones, incluso si crees que tus heridas no son más que rasguños o moratones. Si puedes hacerlo físicamente, documenta el lugar del accidente con la cámara de tu smartphone. La escena debe incluir el vehículo que te golpeó (y la matrícula), los rasguños, los moratones, la ropa rota y el estado de tu bicicleta.
Si sus lesiones no requieren el traslado a un servicio de urgencias, busque rápidamente tratamiento en un centro de atención urgente o en su médico de cabecera. Se sabe que el subidón de adrenalina tras un accidente oculta otras lesiones, y estos problemas pueden tener consecuencias para la salud a largo plazo si no se recibe un tratamiento rápido. Su médico puede remitirle a un fisiatra, un neurólogo, un ortopedista o un médico especialista en el tratamiento del dolor. Asegúrese de acudir a esas citas y de seguir la terapia recomendada.